Acero corrugado: resistencia y versatilidad en la construcción

El acero corrugado es un tipo de acero ampliamente utilizado en la construcción debido a sus propiedades de resistencia y versatilidad. Su nombre proviene de las corrugas o estrías que se encuentran en su superficie, lo cual le brinda mayor adherencia y agarre en estructuras de concreto.Las barras de acero corrugado son un material indispensable en la construcción debido a su resistencia, adherencia y flexibilidad. Su uso en estructuras de concreto armado, puentes y edificios de gran altura garantiza la seguridad y durabilidad de las construcciones. Gracias a sus propiedades, el acero corrugado continúa siendo una elección confiable para los ingenieros y constructores en todo el mundo.

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Peso Acero Corrugado - Tabla de Pesos y Medidas

Diámetro (mm)	Peso (kg/m)
6	0,22
8	0,40
10	0,62
12	0,85
16	1,58
20	2,47
25	3,85
32	6,31

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Varillas de Acero Corrugado: Propiedades, Tipos y Usos en la Construcción

Las varillas de acero corrugado, también conocidas como barras de acero corrugado, barras corrugadas o tetracero, son elementos metálicos que se utilizan para reforzar el hormigón y otras estructuras de construcción. Estas varillas tienen una superficie rugosa o corrugada que mejora la adherencia con el hormigón y evita el deslizamiento o la separación. Las barras de refuerzo de acero corrugado son esenciales para la construcción de edificios, puentes, carreteras y otras obras civiles que requieren resistencia, durabilidad y seguridad.

Propiedades de las Varillas Corrugadas

Las varillas de acero corrugado se fabrican a partir de acero al carbono, que es una aleación de hierro y carbono. El acero al carbono tiene una alta resistencia y ductilidad, lo que lo hace adecuado para soportar cargas y esfuerzos. La composición química del acero al carbono varía según el tipo de varilla, pero generalmente contiene entre un 0,08% y un 0,25% de carbono, además de otros elementos como manganeso, silicio, fósforo y azufre.

Las propiedades mecánicas de las varillas de construcción de acero corrugado dependen del proceso de fabricación, el diámetro, la resistencia y el grado de corrugación. Entre las propiedades más importantes se encuentran:

La resistencia a la tracción, que es la capacidad de la varilla para resistir la fuerza que tiende a estirarla o romperla. Se mide en megapascales (MPa) o kilogramos por milímetro cuadrado (kg/mm²). La resistencia a la tracción de las barras de acero corrugado suele estar entre 400 y 600 MPa, dependiendo del tipo de varilla.
La resistencia al doblado, que es la capacidad de la varilla para soportar la fuerza que tiende a curvarla o deformarla. Se mide en grados o porcentajes de ángulo de doblado. La resistencia al doblado de las barras corrugadas de acero suele estar entre 90 y 180 grados, dependiendo del diámetro de la varilla.
El módulo de elasticidad, que es la relación entre la tensión y la deformación de la varilla. Se mide en gigapascales (GPa) o toneladas por milímetro cuadrado (t/mm²). El módulo de elasticidad de las varillas de acero corrugado suele estar entre 200 y 210 GPa, lo que indica una alta rigidez y recuperación de la forma original.

Tipos de Barras de Acero Corrugado

Las varillas de acero corrugado se clasifican según dos criterios principales: el diámetro y la resistencia. El diámetro es la medida del grosor de la varilla, que influye en la cantidad de acero que se necesita para una obra y en la capacidad de carga de la estructura. La resistencia es la medida de la capacidad de la varilla para soportar esfuerzos y deformaciones, que determina el grado de seguridad y durabilidad de la obra.

Clasificación del acero corrugado según el diámetro

El diámetro de las varillas para concreto de acero corrugado se expresa en milímetros (mm) y suele estar entre 6 y 50 mm. Según el diámetro, las barras corrugadas se pueden agrupar en las siguientes categorías:

Varillas de diámetro pequeño (6, 8 y 10 mm): se utilizan para obras de pequeña envergadura, como muros, losas, vigas o columnas de baja altura. Estas varillas tienen una alta resistencia al doblado y una baja resistencia a la tracción.
Varillas de diámetro medio (12, 16 y 20 mm): se utilizan para obras de mediana envergadura, como edificios de varias plantas, puentes o carreteras. Estas varillas tienen una resistencia al doblado y a la tracción equilibradas.
Varillas de diámetro grande (25, 32, 40 y 50 mm): se utilizan para obras de gran envergadura, como rascacielos, presas o túneles. Estas varillas tienen una baja resistencia al doblado y una alta resistencia a la tracción.

Clasificación del acero corrugado según la resistencia

La resistencia de las varillas de acero corrugado se expresa en megapascales (MPa) o kilogramos por milímetro cuadrado (kg/mm²) y suele estar entre 400 y 600 MPa. Según la resistencia, las varillas se pueden clasificar en los siguientes tipos:

Varillas de resistencia normal (400 MPa o 40 kg/mm²): son las más comunes y se utilizan para la mayoría de las obras de construcción. Tienen una buena relación entre resistencia y ductilidad, lo que les permite adaptarse a las variaciones de carga y temperatura.
Varillas de resistencia alta (500 MPa o 50 kg/mm²): son más resistentes que las anteriores y se utilizan para obras que requieren mayor seguridad y durabilidad. Tienen una menor ductilidad que las de resistencia normal, lo que implica un mayor cuidado en el doblado y el transporte.
Varillas de resistencia especial (600 MPa o 60 kg/mm²): son las más resistentes y se utilizan para obras que exigen una elevada capacidad de carga y una mínima deformación. Tienen una muy baja ductilidad que las de resistencia alta, lo que requiere un tratamiento térmico especial para evitar fisuras o roturas.

Proceso de Fabricación de las Barras Corrugadas

Las barras de acero corrugado se fabrican mediante un proceso de laminado en caliente, que consiste en calentar el acero al carbono hasta una temperatura de unos 1200 °C y luego pasarlos por unos rodillos que le dan la forma y el diámetro deseados. El laminado en caliente permite obtener varillas de acero corrugado con una alta resistencia y una buena ductilidad.

Después del laminado en caliente, las barras de acero corrugado se someten a un proceso de corrugado y corte, que consiste en crear unas estrías o surcos en la superficie de la varilla para mejorar la adherencia con el hormigón y facilitar el anclaje. El corrugado se realiza mediante unos rodillos especiales que presionan la varilla en caliente o en frío. El corte se realiza mediante unas cizallas que cortan la varilla según la longitud requerida.

Normativas y Certificaciones

Las varillas de acero corrugado deben cumplir con unas normativas y certificaciones que garantizan su calidad, seguridad y sostenibilidad. Estas normativas y certificaciones varían según el país o la región donde se fabrican o se utilizan las varillas, pero algunas de las más importantes son:

Normativas internacionales: son las que establecen los estándares mínimos de calidad y seguridad para las varillas de acero corrugado a nivel mundial. Algunas de las más reconocidas son la ISO 6935 (Organización Internacional de Normalización), la ASTM A615 (Sociedad Americana de Ensayos y Materiales) y la EN 10080 (Comité Europeo de Normalización).
Certificaciones de calidad: son las que acreditan que las varillas de acero corrugado cumplen con los requisitos de calidad establecidos por las normativas internacionales o nacionales. Algunas de las más prestigiosas son la ISO 9001 (Sistema de Gestión de la Calidad), la CE (Conformidad Europea) y la AENOR (Asociación Española de Normalización y Certificación).

Uso de Varillas de Acero Corrugado en la Construcción

Las barras de acero corrugado se utilizan principalmente para reforzar el hormigón y otras estructuras de construcción. El hormigón es un material compuesto por cemento, agua, arena y grava, que tiene una alta resistencia a la compresión, pero una baja resistencia a la tracción. Por eso, se le añaden varillas acero corrugado, que tienen una alta resistencia a la tracción y forman lo que se conoce como hormigón armado. El hormigón armado es un material muy resistente y versátil, que se adapta a diferentes formas y diseños.

Las armaduras de acero corrugado se colocan en el interior del encofrado, que es el molde donde se vierte el hormigón, y se fijan mediante ganchos, estribos o soldaduras. Las barras de refuerzo corrugado se distribuyen según el cálculo estructural, que determina la cantidad, el diámetro, la longitud y la posición de las varillas según las cargas y los esfuerzos que va a soportar la estructura.

Las varillas para estructuras, Varillas para cimentación, se usan para reforzar el hormigón y otras estructuras de construcción en diferentes tipos de obras, como:

En hormigón armado: el hormigón armado se utiliza para construir elementos estructurales como cimientos, pilares, vigas, losas, muros, escaleras, etc. El hormigón armado tiene una alta resistencia a la compresión y a la flexión, y las varillas de acero corrugado le aportan resistencia a la tracción y a la torsión. El hormigón armado es un material económico, duradero y fácil de moldear.
En estructuras de edificios: las estructuras de edificios se componen de elementos de hormigón armado que forman el esqueleto del edificio y soportan las cargas verticales y horizontales. Las varillas de acero estructural se usan para reforzar los elementos de hormigón armado y para crear uniones entre ellos. Las barras de acero corrugado también se usan para reforzar las paredes de ladrillo o bloque, que forman el cerramiento del edificio y aíslan térmica y acústicamente.
En puentes y carreteras: los puentes y las carreteras son obras de ingeniería civil que requieren una alta resistencia y durabilidad. Los puentes y las carreteras se construyen con hormigón armado o con hormigón pretensado, que es un tipo de hormigón armado que se somete a una tensión previa mediante cables de acero. Las varillas de acero para construcción se usan para reforzar el hormigón armado o el hormigón pretensado y para crear uniones entre los elementos. Las varillas de construcción corrugadas también se usan para reforzar las barreras de seguridad, los bordillos, las cunetas y los drenajes.

Reciclaje y Sostenibilidad

Las varillas de acero corrugado son un material reciclable y sostenible, que contribuye a la protección del medio ambiente y al ahorro de recursos naturales. El reciclaje de las varillas de acero corrugado consiste en recuperar el acero de las varillas que se desechan o se demuelen, y volver a fundirlo para obtener nuevas varillas o productos de acero. El reciclaje de las varillas de acero corrugado tiene las siguientes ventajas:

Reduce la cantidad de residuos que se generan en la construcción y la demolición, y evita la contaminación del suelo, el agua y el aire.
Disminuye la demanda de mineral de hierro y de energía para la producción de acero, y evita la emisión de gases de efecto invernadero y otros contaminantes.
Aumenta la disponibilidad de acero para la industria y la construcción, y reduce los costes de transporte y almacenamiento.
Mantiene las propiedades y la calidad del acero, y permite obtener nuevas varillas de acero corrugado con las mismas características que las originales.

El reciclaje de las varillas de acero corrugado se realiza mediante un proceso de separación, limpieza, trituración y fundición. El proceso de reciclaje es el siguiente:

Separación: se separan las varillas de acero corrugado de los demás materiales que forman parte de la estructura, como el hormigón, el ladrillo, el plástico, etc. La separación se puede hacer de forma manual o mecánica, mediante imanes, electroimanes o separadores ópticos.
Limpieza: se limpian las varillas de acero corrugado de los restos de hormigón, pintura, óxido o suciedad que puedan tener. La limpieza se puede hacer mediante agua a presión, cepillos, ácidos o chorros de arena.
Trituración: se trituran las varillas de acero corrugado en trozos pequeños, que facilitan el transporte y la fundición. La trituración se puede hacer mediante cizallas, martillos, prensas o molinos.
Fundición: se funden los trozos de varillas de acero corrugado en un horno, que alcanza una temperatura de unos 1600 °C. La fundición se puede hacer mediante hornos eléctricos, de inducción o de arco. El acero fundido se moldea en lingotes, barras o bobinas, que se pueden usar para fabricar nuevas varillas de acero corrugado u otros productos de acero.